Nuestro próximo destino es un atractivo turístico que se encuentra en Ponferrada (España), importante ciudad en el Camino que conduce a Compostela.
Me refiero al Castillo de los Templarios, una de las fortalezas más importantes del norte de España, construidas en el siglo XV.
Fue declarado Monumento Nacional Histórico Artístico en 1924.
El Castillo de Ponferrada fue inicialmente un pequeño poblado romano, que luego, en la época de los Templarios, la Corona Española le dona este espacio, que fue reforzado con un gran muro exterior y lo ampliaron para servir como palacio habitable y como protección, al paso de los peregrinos que se dirigían a Santiago de Compostela.
El edificio tiene planta cuadrada irregular y en él destaca, sobre todo, una entrada de película, que se realiza cruzando el foso sobre un puente levadizo.
Tras la disolución de la Orden del Temple, el castillo empieza a sufrir deterioros. Hasta el punto de que en la segunda mitad del siglo XX se ubicaron en sus patios unos campos de fútbol.
Es por esto, que el Ayuntamiento de Ponferrada tomó serias medidas y comienza la restauración y ampliación de esta fortaleza medieval.
La entrada cuesta 2,7 €, lo que no resulta caro, para lo excepcional que resulta la visita. Aunque puede abaratarse aún más si se obtiene la entrada conjunta al Museo de la Radio, al Museo del Bierzo y al Castillo, con visita guiada incluida si se quiere.
Y es que pasear por el recinto amurallado puede hacer soñar al visitante con regresar y recrear hazañas, ilusiones o fiestas medievales, como la que se celebra en la villa y llamada la Noche Templaria.
En esta "Noche Templaria", se recrea un acontecimiento medieval lleno de fantasía, en la primera luna llena del mes de julio.
Se trata de la representación de como Frey Guido de Garda, Maestre de la Orden de los Caballeros Templarios, vuelve a la ciudad del Puente de Hierro para sellar con ella un pacto de eterna amistad y entregarle la custodia de los símbolos hallados en la tierra sagrada de Jerusalén: el sagrado Arca de la Alianza y el Santo Grial. La comitiva Templaria es recibida por miles de ponferradinos ataviado con ropajes medievales que, en desfile y custodiando el Arca de la Alianza y el Santo Grial, se dirigen hacia el Castillo.
Llegados hasta aquí se realiza un Juicio a la Orden Templaria. "Yo, Guido de Garda, Maestre de la fortaleza de Ponferrada, comprometo a todo el pueblo de Ponferrada para que vuelva cada año a renovar este compromiso festivo con su historia y su leyenda hasta que el tiempo llegue a borrar la línea del horizonte."
La Noche Templaria es una de las fiestas más animadas del verano de Ponferrada, todo ello amenizado con música, fuegos artificiales, degustaciones gastronómicas (consolidandose con gran popularidad la cena medieval) y animaciones de calles, entre otros.
Las visitas son de martes a sábado: mañana (10:30 a 13:30 horas) y tarde (16 a 19 horas); domingos: mañana. Hay cuatro turnos de visita. Cerrado domingos tarde y lunes. Se realizan visitas guiadas cada media hora en grupos de treinta personas.
Me refiero al Castillo de los Templarios, una de las fortalezas más importantes del norte de España, construidas en el siglo XV.
Fue declarado Monumento Nacional Histórico Artístico en 1924.
El Castillo de Ponferrada fue inicialmente un pequeño poblado romano, que luego, en la época de los Templarios, la Corona Española le dona este espacio, que fue reforzado con un gran muro exterior y lo ampliaron para servir como palacio habitable y como protección, al paso de los peregrinos que se dirigían a Santiago de Compostela.
El edificio tiene planta cuadrada irregular y en él destaca, sobre todo, una entrada de película, que se realiza cruzando el foso sobre un puente levadizo.
Tras la disolución de la Orden del Temple, el castillo empieza a sufrir deterioros. Hasta el punto de que en la segunda mitad del siglo XX se ubicaron en sus patios unos campos de fútbol.
Es por esto, que el Ayuntamiento de Ponferrada tomó serias medidas y comienza la restauración y ampliación de esta fortaleza medieval.
La entrada cuesta 2,7 €, lo que no resulta caro, para lo excepcional que resulta la visita. Aunque puede abaratarse aún más si se obtiene la entrada conjunta al Museo de la Radio, al Museo del Bierzo y al Castillo, con visita guiada incluida si se quiere.
Y es que pasear por el recinto amurallado puede hacer soñar al visitante con regresar y recrear hazañas, ilusiones o fiestas medievales, como la que se celebra en la villa y llamada la Noche Templaria.
En esta "Noche Templaria", se recrea un acontecimiento medieval lleno de fantasía, en la primera luna llena del mes de julio.
Se trata de la representación de como Frey Guido de Garda, Maestre de la Orden de los Caballeros Templarios, vuelve a la ciudad del Puente de Hierro para sellar con ella un pacto de eterna amistad y entregarle la custodia de los símbolos hallados en la tierra sagrada de Jerusalén: el sagrado Arca de la Alianza y el Santo Grial. La comitiva Templaria es recibida por miles de ponferradinos ataviado con ropajes medievales que, en desfile y custodiando el Arca de la Alianza y el Santo Grial, se dirigen hacia el Castillo.
Llegados hasta aquí se realiza un Juicio a la Orden Templaria. "Yo, Guido de Garda, Maestre de la fortaleza de Ponferrada, comprometo a todo el pueblo de Ponferrada para que vuelva cada año a renovar este compromiso festivo con su historia y su leyenda hasta que el tiempo llegue a borrar la línea del horizonte."
La Noche Templaria es una de las fiestas más animadas del verano de Ponferrada, todo ello amenizado con música, fuegos artificiales, degustaciones gastronómicas (consolidandose con gran popularidad la cena medieval) y animaciones de calles, entre otros.
Las visitas son de martes a sábado: mañana (10:30 a 13:30 horas) y tarde (16 a 19 horas); domingos: mañana. Hay cuatro turnos de visita. Cerrado domingos tarde y lunes. Se realizan visitas guiadas cada media hora en grupos de treinta personas.
Fuentes consultadas: Wikipedia y Castillosnet.org
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